La pandemia de COVID-19 presenta desafíos críticos globales ya que afecta a los individuos, a sus familias, a las comunidades, a los servicios de salud y a las economías. Estos tiempos son extraordinarios y hay mucho para hacer en cuanto a recolectar, validar y usar la evidencia: mejorar la preparación y la respuesta y optimizar la gobernanza de nuestros sistemas para el futuro. La investigación ya ha generado una gran oferta: identificando los virus, comenzando a comprender su epidemiología, caracterizando el curso clínico y proveyendo la información para acelerar el desarrollo de nuevas intervenciones – diagnósticas, terapéuticas y de vacunas - aun cuando todavía tomará algún tiempo. ¿Como podríamos mejorar y acelerar el uso de la investigación y sus productos para aportar a nuestro bene cio colectivo, esto es, el bien público global? Este llamado global de IAP enfatiza la importancia vital de dar más para actuar colectivamente: el esfuerzo a escala global es esencial para mitigar la diseminación del coronavirus en todos los territorios.